sábado, 21 de noviembre de 2020

Mata Ratón Glaricidia sepium, neem y níspero

Cerca viva de mata ratón Glaricidia sepium frente a centro campestre en la carretera Upata San Lorenzo vía El Manteco.

Mata ratón en área verde de la Escuela Raúl Leoni de Upata, diagonal al liceo Siso Martínez, en la avenida Raúl Leoni con Alberto Ravell.
El mata ratón nombre científico Gliricidia sepium es una especie arbórea ampliamente plantada en las zonas rurales y urbanas de Venezuela, que ofrece grandes beneficios por su atractiva floración, por el uso ornamental, por su rapidez de crecimiento, adaptabilidad a las duras condiciones de las tierras calientes del Llano y la Orinoquia donde crece abundantemente, por su utilidad como forrajera para la alimentación del ganado vacuno, y porque tradicionalemente es una excelente planta ideal para cercas vivas y cortar el viento en los espacios abiertos de los hatos de la zona. El mata ratón es un árbol de la gran familia de las Leguminosas, específicamente de la subfamilia de las fabáceaes o Papilionaceae, que es una especia altamente apreciada por sus múltiples usos, y por su capacidad para fijar nitrógeno. 

viernes, 13 de noviembre de 2020

Árboles de Upata: Merey


En las sabanas del Este y sureste, por la carretera a Laguna Larga, Unión 2000, o en escondidos caminos rurales cercanos a Upata, o en los cercanos al cerro Guacarapo, existen hileras de este árbol de tierra caliente y suelos arenosos: el merey. En el oriente sobre todo en la zona de El Tigre y con particular intensidad en Ciudad Bolívar existe una cultura del merey, un arbusto o árbol del cual se consume fresco su fruto. De sus semillas se obtiene un alimento copioso en grasa, y proteínas, con el cual se preparan turrones, y una amplia variedad de delicias del arte culinario popular, aunque la gente lo suele demandar en pequeñas presentaciones en bolsas plásticas, para su consumo salado. 
 

Poema al Merey

En el antiguo parque Bicentenario

flanqueando la entrada al baño

una mata de merey nos ofrendaba su reluciente fruto

donde el amarillo, el rojo y el naranja

matizaban su color, es como si la luz de este trópico

dibujara una abstracción al estilo kandiski.

Trato de evocar el árbol, pequeños atisbo

me sugieren que no era de gran tamaño

ya que era fácil tomar su fruto.

Su sabor, es difícil describirlo

me gustaba pero al mismo tiempo

me dejaba un extraño ardor en la garganta.

Notaba que había algo singular en su fruto

una pepa pendiendo como un arete

como si al Creador se e había olvidado

dotarlo de semilla.

Como compensación a tal descuido,

le otorgó bondades a este árbol,

el valor agregado del fruto y la semilla.

Se pierde de vista, merey pasado

el mazapán, es un regalo al paladar,

en Ciudad Bolívar, frente al terminal,

están los kioscos ofertándolos.

La forma de la pepa

ha sido motivo

para apodar a algunas personas

Pepa e Merey

hay historias populares que cuentan

que fulanito, agarró una PEA loca

porque pasó debajo de una mata de Merey.

En Guasipati, a sus habitantes los llaman los mereyeros,

hay un famoso festival llanero

llamado "El Merey de Oro".

Cuando un niño sufría de agmidalitis

lo mandaban a chupar Merey.

La palabra Merey está en el ideario del Guayanes:

tu semilla tostada

el esplendor de colores de tu fruto

esa mágica congregación, Mereyal

el don vegetal que la naturaleza te ofrendó/

que los caminos de tu extirpe

se conserven a perpetuidad

Daniel Ruiz Correa

 

En cuanto al árbol de merey debemos señalar que una planta que luego de adaptarse a los suelos arenosos no necesita mayores cuidados. Se trata de una especie vegetal de porte mediano. Resiste climas calientes, secos, con sequías prolongadas y sembrado en hileras o como cerca viva le proporciona una mayor vistosidad al monótono paisaje de la sabana y chaparrales, tan típica de vastas regiones de los Llanos y del norte de la Guayana venezolana. 
Su nombre científico es Anacardium occidentale, y constituyen junto al mango, la ciruela de huesito, el jobo, y el imponente mijao de los bosques del norte del Orinoco, una de las especies más conocidas y apreciadas de la familia de las Anacardiaceae. Este pequeño árbol es nativo del nordeste de Brasil y de la región de las Guayanas. Su fruto es muy apreciado y en español recibe distintos nombres según la región: Alcayoiba, Anacardo (en España), Castaña de cajú (en Uruguay, Argentina y Chile), Cajuil (En República Dominicana), Marañón (en Perú, sureste de México, Colombia, Ecuador, Panama, Cuba y Centroamérica), Merey, en Venezuela, entre otros.


Anacardium occidentale es una especie de planta originaria del nordeste brasileño con excelentes propiedades medicinales y nutricionales. Actualmente todos sus componentes han sido utilizados en diferentes áreas, desde la elaboración de dulces y cosméticos, hasta la creación de medicamentos para tratar diferentes enfermedades. Se caracteriza por ser un árbol de aspecto desarrollado, de altura aproximada entre 5 y 7 metros, perenne y cuyo tronco se ramifica a muy baja altura. 

Merecure de mi tierra


En Upata decir merecure es remitirnos a uno de los barrios más populares de la ciudad, ubicado a un costado del río Yocoima, en su sector canalizado, entre las calles Van Prag y Unión. Allí hubo en uno de sus recodos un famoso árbol de merecure que le dio su nombre a esta zona, que durante décadas formaba parte de la periferia rural del pueblo en ruta a los valles contiguos que eran asiento de los cultivos de tabaco que en volumen apreciable se cultivaban en sus fundos familiares. Merecure es también un ritmo del joropo venezolano, y obviamente y sobre todo es una especie arbórea que anteriormente fue muy plantada en la vieja ciudad.  

A pesar de no tener la fama de nuestros mangales, mamonales, de la guayaba, de los platanales y las pumalacas tan apreciadas y plantadas en estos tiempos modernos, todavía quedan algunos ejemplares de merecure dispersos por los barrios de la ciudad, en sectores como Las Tablitas, Santo Domingo, en la Perimetral, en el callejón Luis Hurtado con Bicentenario, y en las zonas rurales de la ciudad, donde sobre todo los adultos mayores lo aprecian como un fruto comestible. Los jóvenes apenas tienen alguna referencia de su sabor y se les dificulta reconocerlo a primera vista. 

El merecure o Licania pyrifolia, es uno de los árboles más frondosos y resistentes de las tierras bajas y cálidas de Venezuela,capaz de soportar sin perder su follaje el ardiente Sol del trópico y que da una sombra excelente tanto al ganado vacuno como a las personas, acompañante floral de las casas rurales y presente con frecuencia en zonas campesinas y en espacios urbanos, parques, avenidas y plazas. Pertenece a la familia de las Chrysobalanaceae y es el árbol emblemático del estado Apure.  Sus frutos ovalados contienen una sustancia harinosa que es comestible y de sabor agradable. La madera de este árbol tiene aplicaciones en la carpintería rural, fabricación de estantes, horcones. De crecimiento lento, es un árbol de vida larga que se encuentra desde Martinica hasta Colombia y Venezuela. No obstante sus cualidades ha sido muy poco sembrado en el valle, y pocos niños y adultos, como en antaño, han saboreado su fruto, hoy considerado menor, por lo tanto no es comercializado. 

sábado, 7 de noviembre de 2020

Desde lo alto del cerro La Viuda o Guacarapo Grande


Cerro en su esplendor desde las alturas de San Marcos Santo Domingo




El cerro La Viuda o Guacarapo Grande vistos en varios ángulos, primero desde la escuela Julia de Bolívar, el Cementerio Viejo, y las sabanas de su piedemonte en Santo Domingo II.

El hermoso cerro de La Viuda, o Guacarapo Grande, para diferenciarlo de la colina pequeña adyacente al sector Tres de Mayo, constituye junto al Toro, El Corozo, El Algarrobo, la Mesa de la Carata, Los Chorros, California y Chapire, una de las 9 colinas que abrazan por su cercanía a la ciudad de Upata. 

En lo alto de uno de sus lomeríos vegetación saxícola o sobre lajas, bosques circundantes de altura, y al fondo el valle del Yocoima.

Obviamente una observación más minuciosa del valle, nos coloca ante la evidencia de que en realidad a esta villa la rodean no menos de 30 o quizás más macizos colinosos y lomas, algunos con nombres conocidos y otros sin denominación en el registro toponímico local, entre los que se pueden citar las siguientes: cerro La Cruz, Las Madamas, San Lorenzo, Cacahual, El Timón, Santa Rosa, San Germán, El Aguador, Santa María, Las Delicias, El Orégano, sierra de El Candado, La Vaca, entre otros. 

viernes, 6 de noviembre de 2020

Manteco alcornoque y mandingo o carne asada, triada floral de nuestra sabana

Manteco en el cerro El Toro
Flores del manteco
Pequeño fruto de Byrsonima crassifolia el manteco de nuetras sabanas
Este arbusto y ocasionalmente árbol de pequeño porte está presente en las sabanas venezolanas, tanto en los Llanos occidentales como en Oriente como en la Guayana, se le aprecia por su pequeño fruto, y por su resistencia a la sequía y a los incendios forestales. Es una planta típica de nuestros ecosistemas secos, que forma parte esencial del patrimonio vegetal o floral de los relieves y paisajes del norte y centro de Guayana, donde abunda en los suelos arenosos ricos en sílice. Su nombre científico es Byrsonima crassifolia, y constituye junto al alcornoque, el mandingo o carne asada y obviamente el chaparro, el cuarteto principal de especies de la sabana guayanesa y llanera.